Está cayendo la noche, el verano deja rastros del día cuando el sol fue capaz de atropellar sobre la ciudad que ahora cansada recuesta su rostro sobre almohadas de piedra...mis alas vuelan bajo y las ilusiones se acomodan donde la tristeza dejó deslizar la última lágrima... mi vida ha sido una larga tormenta...que no ha cesado nunca...
Adiós papá, nada me debes, descansa en paz , que tu próxima morada te brinde una nueva oportunidad...